QUE VIENE EL GENIL
Por allí viene el Genil.
Pues que viene caballero,
dejadlo venir.
Y trae al cinto la espada,
flores de su adolescencia,
desde
pues allí tiene nacencia.
Por allí viene el Genil.
Pues que viene sonriente,
dejadlo venir.
Mas para entrar en poblado
debe moderar modales
pues a veces causa enfado
y otras, fueron mortales.
Por allí viene el Genil.
Pues que viene presuroso,
dejadlo venir.
Órgano de plata fría
es tu arpegio sostenido
música que nos debía
a este rincón escogido.
Por allí viene el Genil.
Pues que viene engalanado,
dejadlo venir.
Viene en Écija a buscar
blasones de buena rama,
y dedica su cantar
a damas de buena fama,
y a hombres de mejor cama.
Por allí viene el Genil.
Pues que viene enamorado,
dejadlo venir.
Y mi amor astigitano
que me venga como fuente
porque la niña que amo
aún no ha llegado a veinte.
Y la amo como a mi vida,
y cuando llora, es mi herida.
Por allá se va el Genil.
Pues que hoy estuvo amigo,
dejadlo partir.
Que lleve a Lora del Río,
amores como los míos.
Y que ponga hasta en Sevilla
amores tan escogidos,
que ya desde la semilla,
nadie los dé por vencidos.
Por allá se va el Genil.
Pues que ha de llegar al fin,
dejadlo partir.
Marcelino Fernández Piñón
MI CORTIJO
La cal gritaba blancura
en la pared del cortijo,
el río jugaba a cambiantes
de esmeraldas y zafiros;
pétalos de sangre roja
sobre los lagos de trigo;
del Sol la ruta seguían
girasoles amarillos;
eran las blancas palomas
en el cobalto infinito
azucenas que volaban;
en la orilla del río
buscaban frescor los chopos;
paz cantaban los olivos,
álamos de hojas de plata
daban sombra;
perfume, las madreselvas,
las mimosas…
Es delicioso el paisaje…
Era por fuera más lindo
que por dentro
mi cortijo.
Un alba de primavera
como un sol, por la ladera
llegó una hermosa vaquera…
Desde entonces
mi persona y mi cortijo
tienen reina:
la chavala más bonita
que produjo la ribera
del Genil…
Ahora mucho más bonito
es por dentro
que por fuera mi cortijo.
Tomás Beviá: Violetas. Abrí mi corazón de para en par: 362.
_____________________________________________________
A LA ORILLA DEL RÍO,
BAJO EL GRIS NUBLADO DEL CIELO
Y SOBRE LA TIERRA ENFANGADA,
ERGUÍASE SINIESTRO,
MIENTRAS QUE DE SUS RAMAS
LAS HOJAS AL FLUIDO CAUCE LLORABAN.
DE UN LADO SUS COMPAÑEROS,
DEL OTRO, LA TIBIA CHARCA
QUE DE ESPEJO LE SERVÍA
DESDE QUE ASOMABA EL ALBA.
SOBRE SU PIEL ÁSPERA
Y SUTILMENTE RESQUEBRAJADA,
UNO Y OTRO CORAZÓN
GRABADOS QUEDAN,
MIENTRAS QUE A TRAVÉS DE ELLOS
ILUSIONES Y LA VIDA PASAN.
AQUELLA PLANTA ERGUIDA,
TESTIGO DE ESPERANZAS,
DE TANTOS AMORES DECLARADOS,
DE TANTAS ALEGRÍAS AÑORADAS,
SENTÍA EL PASO DE LOS AÑOS
A MEDIDA QUE SU TRONCO ENSANCHABA.
TRANSCURRÍA EL TIEMPO,
SUS HOJAS LLEGABAN CON LA PRIMAVERA
NORMALMENTE HÚMEDA,
AUNQUE A VECES ALGO SOLEADA,
CON ESAS NOCHES EN QUE LA LUNA
AMIGA SE HACÍA DE SUS RAMAS.
LUEGO, CON EL OTOÑO,
DE NUEVO SE MARCHABAN
MIENTRAS QUE SUS RAMAS,
ALGO TRISTES,
QUEDABAN DESABRIGADAS.
AQUEL ÁRBOL SINIESTRO
REFLEJADO EN CAUCES DE PLATA,
SINTIÓ UN CALOR EN SU CUERPO
Y UN QUEJÍO SE ESCUCHÓ EN LA ALBORADA,
SOÑABA CON AQUELLA PRIMAVERA
Y UN RUISEÑOR QUE CANTÓ EN SUS RAMAS,
PERO EL SUEÑO QUEDÓ ENTRE TINIEBLAS
Y LA LUNA… LLORÓ POR L A MAÑANA.
Juan Palomo.
EL RÍO GENIL
ResponderEliminarTiene Güéjar Sierra un río
al que le llaman Genil,
tiene arte y señorío
donde dan ganas de vivir,
y una elegancia con brío
que no se puede resistir
cómo la que tiene este río.
Su agua cristalina y pura
que le prestan sus hermanos,
que al bajar de la altura
se van tendiendo la mano,
con afecto y con ternura
que, por algo son hermanos.
¿Que qué hermanos son?
por ejemplo: Valdecasillas, ,
otro que llaman Guarnón,
el Vacares, Lucía y Vadillo,
Valdeinfirno y San Juan,
todos caminan, sin pena,
si es que tenían alguna,
ésta ya se les acaba
al unirse al Maitena.
Y después de su descanso
pasajero del Pantano,
se les une otro hermano
que Aguas Blancas se llama.
En Granada, espera el Darro
y ya en tierra más llana
el Dilar y el Munachil,
continúa de buena gana
nuestro querido Genil,
porque sabe que le espera,
ese gran Guadalquivir.
Muchos viajeros ilustres
que por tu cuna pasaron,
admirados se quedaron
de tu singular belleza
y escritos te dedicaron
y lo hicieron con largueza
y hasta coplas te cantaron
ponderando tu grandeza.
Por eso los güéjareños
nos sentimos orgullosos,
y lo decimos aquí,
que no abundan los lugares
como la Cuna del río Genil.
Domingo. Puente.