Tomás Beviá Aranda.
RECUERDOS DE MI CIUDAD.
Mi ciudad tiene una historia
que no se puede olvidar,
que la recuerdan sus calles
como a duendes de cristal,
a caballo por el tiempo
galopando sin parar.
Mi ciudad tuvo unos hombres
que silbaban para llamar,
tirando de la mulilla
el pipero viena ya,
con aguas de las peñuelas
¡niñas! cántaros llenar.
Mi ciudad tuvo un amigo
con salero a rebosar,
que lo llamaron José
por mote Bizco Pardal,
con sus chistes, con su gracia
repartía felicidad.
Mi ciudad tiene una plaza
que será siempre el Salón,
rodeada de naranjos,
acariciada por el sol,
donde nuestros mayores,
como nos cuentan abuelos y abuelas,
jugaron al carro, a las damas
sobre sus poyos de piedra.
Mi ciudad tiene un Salón
con perfumes de azahar,
donde el Panga pregonaba
su lotería premiá.
Debajo de los portales
se podía degustar
los molletes del Copete
con manteca colorá.
Una historia que he vivido,
una historia que no olvido,
una historia que yo cuento,
que lo sepan nuestros hijos.
¡Que Écija tenga un recuerdo!
Juan Palomo Ibáñez
Os dejamos un video con este poema musicalizado por Nuevos Trovadores y con imágenes de "Ecija en Sepia" de Ramón Freire Gálvez y de "Imágenes y Recuerdos de la ciudad de Écija" de Juan Méndez Varo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario